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Un caso muy particular en las redes de drenaje pluvial es el drenaje de las estructuras asociadas a los transformadores en aceite. Este tipo de transformadores se caracterizan por tener su circuito magnético y arrollamientos completamente sumergidos en aceite, que se utiliza como líquido aislante.  

Habitualmente, los transformadores se instalan a la intemperie, de tal modo que, en caso de lluvia y fuga de aceite simultánea, el sistema de drenaje debe ser capaz de retener y evitar el vertido del aceite al medio. Ya sea bajo condiciones de operación normal, en las que se arrastraran partículas aceitosas por el normal funcionamiento de la instalación, o bien bajo condiciones eventuales, en caso de fuga por avería, el sistema de drenaje debe ser capaz de retener la totalidad del aceite contenido en el transformador.

Funcionamiento eventual: situación de avería

Los transformadores en aceite se instalan sobre cimentaciones de hormigón que configuran un cubeto de retención antiderrames. Este cubeto se dimensiona para que, en caso de derrame de aceite por alguna avería, se pueda alojar en su interior la totalidad del volumen de aceite que contiene un transformador. Adicionalmente, el cubeto está dotado, en toda su superficie, de rejillas metálicas cortafuegos y una capa de gravas para evitar la propagación del fuego en caso de incendio.

Al quedar instalados a la intemperie, el cubeto de retención tiene una conexión a la red de drenaje pluvial para desaguar el agua de lluvia que cae en su interior.

La tubería de drenaje pluvial sale del cubeto hacia la red de drenaje a una altura H por encima del fondo del cubeto. El volumen definido por la superficie del cubeto y la altura H es mayor al volumen de aceite que almacena un transformador. De este modo se dispone de un volumen suficiente para alojar una eventual fuga de aceite del trasformador.

Para conseguir la retención del aceite, la toma de agua de la tubería de drenaje en el interior del cubeto se realiza por el fondo de éste, y no a la altura H, mediante un tramo de tubería vertical. De este modo, se facilita la salida del agua de lluvia, pero no del aceite, que se acumulará en el cubeto flotando sobre el agua de lluvia debido a la diferencia de densidades entre ambos líquidos.

La retirada del aceite vertido en el interior del cubeto debe ser a cargo de un gestor de residuos autorizado.

Funcionamiento normal

La red de drenaje pluvial procedente del cubeto antiderrames del transformador se conecta a un equipo separador de hidrocarburos. Este equipo se instala en línea en la misma red de drenaje y enterrado a la profundidad de la conducción. El objetivo del separador de hidrocarburos es retener pequeñas partículas de aceite que puedan verse arrastradas hacia la red de drenaje pluvial.

El diseño del separador de hidrocarburos se realiza de acuerdo con la norma EN 858. La misma norma establece dos tipos de separadores: Clase I y Clase II. Cada tipo se define en función del contenido máximo permisible de aceite residual en el punto de vertido, siendo:

• Clase I (separador por coalescencia): 5 mg/l
• Clase II (separador por gravedad): 10 mg/l

El funcionamiento combinado del cubeto antiderrames, dotado de un sistema de vaciado adecuadamente diseñado, y del separador de hidrocarburos, ubicado en línea aguas abajo en la red de drenaje, garantizan el mínimo vertido de aceites e hidrocarburos al medio en el sistema de drenaje pluvial de la estación transformadora.

Desde el equipo de Tecnologías del Agua en Sener, estamos acostumbrados a incorporar este tipo de diseños en nuestros proyectos; en todo tipo de subestaciones eléctricas de transformación, ubicadas en multitud de los proyectos en los que trabajamos.